Mas nueces que ruidos

lunes, marzo 31, 2008

Descansa en paz

Como escribir algo en este momento, aunque pasan los dias y trato de seguir adelante... la adrenalina, el stress y el nervio a flor de piel me hacen seguir adelante. Seguir y seguir, no mirar atras y dejar pasar. Pero siempre hay un segundo donde hay que detenerse. Y ahi, la pena no cesa tan facilmente. Hace casi cinco anios, Thomas comenzo una amistad con Baldomero, un nene increiblemente mas blanco que 'el, lleno de hermosos rulos llevados casi con estilo afro, y de hermosa y dulce sonrisa. Junto con la amistad de los chiquitos, deviene la de los padres y ahi conoci a Gerardo; que una noche de verano y en medio de copas me freno frente al Unico para preguntarme "sos el papa de thomas? sos igual!!! yo soy el papa de Baldo, Baldomero... el mejor amigo de tu hijo". Luego del susto que me pego, pudimos charlar y siempre reirnos de esa noche. Junto con el tiempo, pasaron salidas, cumples, fiestas del colegio, cine con los chicos, futbol, alguna que otra cena, y muchas charlas. El comun denominador del divorcio, y el apego a los hijos. Nos hicimos unidos, y compinches en las charlas, nos reiamos del "nido de serpientes" formado por esas madres que estabas mas preocupadas por sacar el cuero que por sus hijos, nos compramos el mismo auto y bien orgullosos de nuestros negocios estabamos. Siempre voy a recordar la ternura de sus gestos al hablarle a su hijo, y el amor tan claramente demostrado y puro que tenia. Se ocupaba casi todo el dia de su hijo, era realmente un padre ejemplar. El sabado lo encontro su ex mujer muerto en su casa; y casi todos nos paralizamos. Me quede esa noche con su hijo, cuidandolo y ocultando el dolor que se nos venia por delante. Siento una pena indescriptible, profunda, tan profunda que se me hunde el pecho, se me desgarra el corazon al pensar que podria solo ser un pequenio recuerdo para su hijo... que todo ese amor infinito no sera recordado por quien lo tenia dia a dia... Se que nosotros, los que aun quedamos tenemos la tarea de no dejarlo ir tan facilmente. Le habia prometido ir a verlo tocar tantas veces, tantas como le falle; le habia prometido esta foto que jamas le mande y jamas le voy a poder mandar. Triste, divagando y perdido entre las lagrimas te abrazo desde aca y por siempre.